-1 vaso de agua caliente
-3 vasos de azucar
-Palito de madera (tipo moruno)
-Limpiapipas (yo utilicé los de tela)
-Cuerda
-Un palo para mezclar
-Colorante
Comenzamos poniendo en un cazo el agua caliente (¡cuidado con quemarse!) y añadimos unas gotas del colorante, el azúcar y calentamos aprox. 5 minutos removiendo con el palo muy bien hasta que no veamos los granos de azúcar. Cuando eso pase lo retiramos del calor y dejamos enfriar.
Mientras preparamos la base: cortamos un palo de moruno, dejando que sea el largo más ancho que el vaso.
Cogemos los limpiapipas y los enroscamos sobre sí mismos, como una espiral.
Cuando enfríe la mezcla, lo pasamos 3 vasos y añadimos colorante alimentario. Ya solo queda introducir los limpiapipas en el agua y esperar 2 semanas.
Podemos entonces sacarlos del agua, dejarlos secar en papel secante y colocarlos donde queramos.
¿No os encantan? Podéis pintarlas como hice yo, hacer joyitas, un regalo para un familiar...
Además, podéis conseguir que cristalice más si antes de meter los limpiapipas en el agua los embadurnáis de azúcar, ¡¡crecerán mucho más!!.
Espero que os hayan gustado y espero vuestras fotos en Instagram: salamandra_teduka
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